Analgésico. Antiinflamatorio. Astringente
La alquimila alpina, Alchemilla alpina, también conocida con los nombres de estellaria, es una hierba perenne muy común en la región norte de toda Europa y Asia, también se le puede encontrar en zonas montañosas al norte de África y en Sudamérica (donde fue introducida).
Es una planta pequeña la cual crece en forma de pequeños arbustos, con altura de entre 10 y máximo 50 centímetros. Sus hojas poseen un aspecto peculiar, se dividen en gajos de 5 ó 7 puntas lo cual le da un aspecto de “estrella”, de allí uno de sus nombres comunes. Éstas tienen un color verde obscuro y poseen un aspecto completamente liso.
La alquimila posee un vello color blanco el cual recubre los tallos y la parte posterior de la hoja, este vello le da un aspecto brillante a la planta. Las flores por su parte son pequeñas, de color amarillo y crecen en forma de ramilletes. Su floración se da entre los meses de junio y hasta agosto.
La colecta de la alquimila alpina se da durante la misma temporada de floración. Se trata de una planta de muchos beneficios y se aprovechan todas sus partes: raíces, tallos, hojas y flores.
Propiedades terapéuticas
Desde hace siglos la alquimila se ha empleado para aliviar inflamaciones tanto de la piel, como de los ojos y también del tracto digestivo. Posee asimismo un efecto analgésico por lo que es ideal para una gran gama de dolores y afecciones.
Uno de sus usos más populares es como antiinflamatorio intestinal, que también ayuda a contrarrestar dolores que pueda haber, también es efectiva contra los cólicos. El otro uso conocido es como tratamiento para dolores e inflamaciones en los ojos, lo cual se logra con la decocción de la planta.
Su uso hoy en día es menos frecuente, y gran parte de sus beneficios se emplean para aliviar dolores de animales los cuales son propensos a comer hierbas nocivas. Esto no significa que nosotros no podamos aprovechar todas sus bondades.
Modo de uso
- Infusión. Se toman hojas y ramas de la planta y se ponen a hervir en agua, después se filtra y se toma caliente. Se puede tomar hasta 2 tazas al día, no se recomienda añadir azúcar ya que puede resultar contraproducente para los dolores intestinales.
- Decocción. Se colocan raíces secas o flores a hervir en agua durante 5 o 10 minutos. Se filtra y después se deja enfriar. Se puede tomar como la infusión o usar para lavados.